Me despierto muy pronto, otra vez, y no me resisto a comenzar la lectura de Afterpop. Ayer le eché un vistazo y ahora acabo de terminar la introducción (Enter) que me ha fascinado y me ha dado una energía increíble. Reconozco que esta impresión puede ser muy relativa. Me encuentro en un momento tan positivo que tiendo a valorar todo de una manera un tanto exagerada. Mi mujer y yo nos reímos mucho con este inesperado optimismo, nos acordamos del insoportable entusiasta que interpreta Alec Baldwin en uno de los mejores episodios de Friends. En cualquier caso, el libro de Eloy Fernández Porta está entre lo más interesante que he leído en los últimos años, y produce en mí un efecto adolescente casi olvidado: ahora él es el tipo al que me gustaría parecerme, al que quiero conocer, a quien intentaría resultar interesante. No tengo remedio, ya que me reconozco incapaz de escribir algo así, me consuelo haciéndome creer que seré de los pocos que logre "realmente" entenderlo.
Ah, la chica de la foto es Line Gost. De nada.
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